Consejos de limpieza-Publicado 01/03/2023-Actualizado 03/12/2024
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¿Cuánto cuesta recargar un coche eléctrico?
En este artículo te explicamos las diferentes opciones de recarga de tu automóvil eléctrico y cuánto cuesta cada una. Comparamos las ventajas y desventajas de recargar el coche en casa y en los puntos de recarga públicos, y los mejores coches que puedes elegir para ahorrarte dinero.
¿Cómo y cuándo recargar tu vehículo en casa?
Cargar un coche eléctrico en casa es, sin duda, la opción preferida de la mayoría de los usuarios de vehículos eléctricos. Las ventajas son el bajo coste y la facilidad. Pero es importante saber que cuando cargamos nuestro automóvil eléctrico en una toma de corriente doméstica, simplemente usando el cable proporcionado por el fabricante, como hacen tres cuartas partes de los usuarios, la carga no estará optimizada. La carga será más lenta que si lo enchufamos en un punto de recarga específico para coches eléctricos. Además, una recarga no optimizada significa mayor desperdicio de energía, especialmente por la disipación de calor. Por último, usar una toma de corriente convencional puede resultar peligroso en algunos casos. Si la instalación eléctrica de la vivienda es vieja, es posible que las tomas no estén diseñadas para soportar la corriente necesaria para recargar una batería. Por todo ello, te recomendamos que utilices la corriente tradicional solo para recargas puntuales, por ejemplo, si estás de viaje.
Si quieres recargar tu coche eléctrico en casa, lo ideal es instalar una toma especial. Dependiendo de tu presupuesto, puedes optar por una toma reforzada de recarga para vehículos eléctricos, que ofrece más potencia sin poner en riesgo tu instalación; una toma clásica similar a las que encontrarás en los espacios públicos; o un wallbox (punto de recarga mural o de pared) optimizado para uso doméstico. La instalación en tu hogar de una toma de carga para vehículos eléctricos representa una inversión considerable, de más de mil euros. No obstante, puedes optar a las ayudas existentes para la instalación de puntos de recarga en viviendas. Si vives en una comunidad de vecinos, tienes derecho a instalar una toma en tu plaza de aparcamiento desde el contador principal de tu vivienda. Otra forma de reducir el gasto es elegir un wallbox, que, como su nombre indica, es una toma de pared. Encontrarás wallboxes con niveles de potencia entre 3,7 Kw y 22 kW. Su precio es de varios cientos de euros, dependiendo de la marca y del modelo. Otra ventaja de los wallboxes es que se trata de dispositivos estandarizados. Por tanto, si consultas la información de algunos modelos eléctricos de Citroën, podrás encontrar el dato del tiempo de recarga con los diferentes modelos de wallbox.
Por último, con independencia de la opción elegida, el momento de la recarga del vehículo también es importante. Si tienes una tarifa eléctrica reducida en horas valle, te interesa recargarlo durante la noche. Algunas compañías eléctricas tienen incluso ofertas específicas para propietarios de vehículos eléctricos. Una buena forma de asegurarte de que la recarga se hace durante la noche, sin tener que levantarte a enchufar el coche, es usar tomas o wallboxes programables.
Una vez que hayas comprado el sistema de recarga elegido, el precio de recargar tu coche eléctrico dependerá del consumo del vehículo y ascenderá a entre 1,5 y 4 euros por 100 km aproximadamente. Para que te hagas una idea, un coche con motor térmico te cuesta entre 6 y 9 euros por cada 100 km, en comparación.
Uso adecuado de los puntos de recarga públicos
La principal ventaja de usar los puntos de recarga públicos es la velocidad. La mayoría ofrece una potencia de 22 kW y algunos modelos rápidos tienen una carga aún más potente. Esto se debe al funcionamiento específico de estas estaciones de recarga rápida de coches eléctricos, que convierten la corriente alterna de la red eléctrica en la corriente continua que utilizan las baterías. Gracias a ello, se transmite mayor cantidad de energía más rápidamente.
La desventaja de los puntos de recarga públicos de coches eléctricos es el coste. El precio depende de la compañía y del sistema de facturación. Cada proveedor tiene un sistema diferente: los hay que funcionan con aplicaciones móviles, mientras que otros requieren una tarjeta de punto de recarga para automóviles eléctricos. Con todo, puedes ahorrarte dinero si eliges bien dónde recargar. Por ejemplo, algunos aparcamientos disponen de puntos de recarga gratuitos para sus usuarios. Dependiendo del tiempo de recarga que necesita tu coche eléctrico, estos puntos pueden ser una alternativa interesante. Algunas cadenas de supermercados y de concesionarios de automóviles también ofrecen recargas gratuitas a sus clientes. Si te encuentras de viaje, puedes recurrir a una de las terminales existentes en algunas áreas de servicio de las autopistas. En estos casos, el precio de recargar tu coche eléctrico podría ser mayor, pero en muchos casos el tiempo es menor porque emplean tecnologías avanzadas.
Por lo tanto, el coste de recargar un coche eléctrico en un punto de recarga variará mucho, dependiendo de las características de nuestro vehículo, como la capacidad de la batería, y del operador del punto de recarga. Por todo ello, es difícil saber con exactitud cuánto cuesta recargar un automóvil eléctrico en un punto de recarga. En todo caso, si quieres ahorrarte dinero, no dudes en utilizar alguna de las aplicaciones móviles específicas, que te muestran dónde se encuentran los terminales gratuitos más próximos.
¿Qué vehículo elegir para ahorrar en las recargas?
La elección del vehículo tendrá una consecuencia en el coste de las recargas. En primer lugar, debemos diferenciar entre coches eléctricos puros y coches híbridos enchufables. Este último tipo no necesita recargarse a diario, pero es cierto que circular en modo no eléctrico te costará más, a la larga.
Respecto a los coches eléctricos, el consumo y la capacidad de la batería son distintos en cada modelo. Por ejemplo, si nos fijamos en los Peugeot eléctricos que se comercializan, encontrarás baterías con capacidad variable. La mayoría de los modelos funcionan con una batería de 50 kWh, pero algunos modelos más grandes, como el e-Traveller, están equipados con baterías de mayor capacidad. Como es lógico, recargar una batería que puede almacenar más energía cuesta más dinero. A cambio, al tener mayor autonomía, no es necesario recargar estas baterías con tanta frecuencia.
Por último, resulta difícil responder a la pregunta de cuánto consume un coche eléctrico, porque, al igual que sucede con los coches con motor de combustión, los vehículos eléctricos son todos diferentes. El peso del coche, su aerodinámica y la potencia de su motor son factores que afectarán su consumo. También influye tu forma de conducir: circular a una velocidad moderada y limitar el uso de determinadas funciones como el aire acondicionado son aspectos que repercuten en una reducción del coste asociado con la recarga de tu coche eléctrico.
El gasto de un coche eléctrico a los 100 km depende, por un lado, de su consumo y, por otro, de la tarifa eléctrica. En el caso de la recarga doméstica, EDF estima el coste entre 1,5 y 4 euros. Si optas por recargar en un punto de recarga, el precio variará dependiendo de la oferta disponible.
El amperaje utilizado para recargar tu coche eléctrico afecta la potencia de carga y, por lo tanto, su duración. En las tomas de recarga doméstica conectadas a una red monofásica, los amperajes de 16 y 32 A corresponden a potencias de carga de 3,7 y 7,4 kW respectivamente. Un punto de recarga de 3,7 kW puede recuperar entre 15 y 20 km de autonomía por hora de recarga, y el doble en el caso de un punto de recarga de 7,4 kW. Los puntos de recarga públicos pueden tener un amperaje más alto.